jueves, 7 de mayo de 2015

AMAZONÍA ECUATORIANA O recibir mis 29 en donde no conocen el "Feliz cumpleaños"

Hay algo especial entre la luna llena y yo. Siempre nos encontramos en lugares increíbles y mes a mes me sorprende. La noche de mi cumpleaños de este 2015 me citó en la selva y con la bendición de la compañía de mi hermana.



En la comuna Morete Cocha nos recibe Esteban, el presidente. Es el hijo de quien fundó la comunidad que esta festejando su 55 aniversario. Su padre era achuar, pero hace años llegó a pedir ayuda a otra comunidad más" civilizada" en donde un cura misionero le dijo que debía tener un nombre castellano, lo bautizó José y le "donó" su apellido, Suárez. José le puso a sus hijos nombres europeos, pero Esteban nombró a la siguiente generación con nombres achuar recuperando las raíces de su padre. Hoy la gente que integra la comuna es mezcla de achuar, shuar, saparas y quichuas, pero el dialecto común entre todos es el quichua.
Nos invita a comer a su casa para que conozcamos a su familia. En un tronco ponen un mantel de hoja y encima una pila de plátanos sancochados. En unos cuencos de barro nos sirven un caldo con carne de mono.
Justo antes de entrar en la selva estuve viviendo en un templo Haré Krishna donde hablábamos del perjuicio de comer carne, sobre todo para el planeta por la contaminación que producen los criaderos y el papel especial que tienen en la pobreza y el hambre del mundo. En cambio Esteban tuvo que internarse en la selva 9 días, a 9 horas de caminata para poder cazar lo que nos estaba ofreciendo. Y acá el menú es escaso y no muy variado, sólo pueden comer lo que cazan y pescan o cultivan en sus fincas. De ninguna manera podía despreciar lo que tenía enfrente.
La noche anterior la pareja predijo la llegada de gente ajena a la comunidad. Esteban no logró dormir profundo y su mujer soñó que el río crecía descomunalmente. Eso para ellos tiene una lectura clarísima, y somos nosotras.
En cariñosa señal de bienvenida nos pintan la cara con wito como lo hacen ellos. Es una semilla que tardará 8 días en borrarse de mi piel.

Al día siguiente bien temprano comienzan los festejos. Hacen música golpeando monotonamente un bombo, con las caras pintadas, collares de semillas y espectaculares sombreros hechos con plumas y pieles de animales, mientras nos invitan a bailar.
Todo el tiempo se toma chicha de yuca. Se prepara hirviendola y luego es masticada x las mujeres y escupida en recipientes enormes en los que se deja fermentar de 2 a 4 días, mientras se pone cada vez más fuerte. Se sirve en mocaguas, vasijas de barro super delgadas y pintadas con figuras geométricas que sólo hacen las mujeres y las cocen en tinajas al fuego directo tapadas con cenizas. Las mujeres van ofreciendo chicha a todos los presentes con la mocagua en sus manos y sin soltarla, uno sólo debe tomar sin agarrarlos la dosis que ellas deciden mientras empinan bruscamente la vasija hacia tu boca. Y es falta de respeto despreciarles...
Afuera hay competencia de puntería con cervatana,  velocidad en el río y chichada de mujeres, todas al rededor de una mesa con sus mocaguas llenas compitiendo quien se la termina primero de un sólo sorbo. También hay una competencia de belleza, sumaq warmi, en la que desafortunadamente me toca ser jurado. Las 4 chicas caminan con sus tacos embarrados y saludan imitando una cultura ajena, los nervios les ganan al punto de no lograr modular palabra sobre el escenario.
Queremos participar en algo y lo que nos parece más cercano es el fútbol de mujeres, pero pasamos verguenza con las chicas que le pegan a la pelota con una destreza increíble y terminan embarradas hasta la cabeza.
Al día siguiente la fiesta empieza a las 3am con una guayusa usina, es una planta con la que se hacen unas ollas de infusión gigantes que hay que tomar en cantidad para vomitar, y supuestamente te deja un poco mareado, luego hacerse una limpieza con esas hojas y más tarde aspirar agua con tabaco puro x la nariz para limpiar las vías respiratorias y la mente.
A la tarde la fiesta sigue de casa en casa donde se sigue tomando chicha hasta el amanecer. La tradición es ir a la casa de más abajo, tomar e ir todos a la siguiente casa, seguir tomando e ir a la casa de más arriba hasta terminar todos juntos en la última casa todos borrachisimos hasta caer dormidos. Para esto hay que caminar por la selva y atravesar ríos caminando en plena noche. Nosotras no aguantamos tanta fiesta después de haber despertando a las 2:00, así que volvimos bajo la luna que nos iluminó todo el camino.

Llegó el día de mi cumpleaños y nos fuimos a la casa de Santiago, la persona por la cual conocimos la comunidad. También cumplían el mismo día su hermana Paulina y Lindsy, su novia inglesa y una gran amiga mía. Preparamos trufas de avena, panela y banana, lo más parecido a una torta que se nos ocurrió en esas circunstancias, mientras todos miraban atentos la novedad y nos ayudaban a armar las bolitas. Puestas en pirámide y con una vela en la cima cantamos el " feliz cumpleaños" en castellano, inglés y esloveno. Ellos no acostumbran a celebrar así que fue lindo poder compartirles algo e inventar un " feliz cumpleaños" en quichua para cantarle a Paulina cuando sopló su velita.
Felices nos subimos a una canoa de tronco y fuimos río abajo hasta una cascada hermosa a pasar el resto del día jugando en el agua con los niños. Un cumpleaños verdaderamente singular con gente hermosa que nos recibe con los corazones a abiertos para compartirnos su mundo.

Morete esta atravesando momentos muy dificiles con empresas extranjeras.  El presidente y 6 compañeros más tienen una condena de 8 años y una multa imposible de pagar por quemar los depósitos de una maderera tras 7 meses de denuncias por talar en su territorio y espantar los animales, advirtiendo que si no se hacía nada al respecto actuarian a su manera. Esteban no tiene miedo de terminar en la cárcel, pero de ninguna manera abandonará sus ideales perjudicando a su pueblo.
La condena y la multa podrían perdonarse si permiten a una petrolera explotar en otras zonas de su territorio, lo cual contaminaria el río del que beben y viven ellos y otras comunidades más abajo y espantaría a los animales impidiéndoles cazar. Ágip exploró ese pozo hace 25 años y encontró petróleo que aún no estaba listo para extraer. Sabían que hoy sería posible así que hicieron un contrato para suplir los daños que habían ocacionado, que finalizó hace un mes, en el cual pagan 2 médicos, 2 profesores, comida y vuelos muy económicos para los comuneros. Después de acostumbrarse a esas comodidades es muy difícil convencer a la gente de lo negativo que es dejar entrar a la empresa, y bajo promesas de más beneficios y trabajo una vez que empiecen a explotar. La comunidad no tiene ninguna manera de generar ingresos, por lo que esta sería la única opción que perciben viable. Y en esto están trabajando Santiago y Lindsy, generando proyectos de turismo y artesanías para alentar a la comunidad.
Es dificil comprender el daño que genera "civilizar" estas comunidades. A nosotras nos alojaron en el predio de la escuela, la parte más "occidental" como ellos dicen. Nos acostumbramos a tener cantidad de personas mirándonos por la ventana, agarrándose de las rejas, con las caras tiesas, observando como por television las cosas que ellos no pueden tener en sus casas. Paredes de material, la mesada de la cocina con pileta y canillas, un anafe a gas. Esos ojos observandome fijo, que no responden ni a los saludos me hacen sentir incómoda estando de visitante y teniendo condiciones de vida diferentes.
El concepto de evolución que temos en el planeta está totalmente equivocado. Ellos son sanos, autosuficientes y sus familias son unidas, los niños crecen libres y sin miedos. Nosotros nos contaminamos con lo que comemos, tomamos, y hasta respiramos. Y el capitalismo parió sociedades y familias quebradas. Pero cada vez más parece imposible salirse, y hasta las comunidades perdidas en el medio del amazonas se ven obligadas a sublevarse ante el sistema.

El lunes arrancamos la caminata a las 7:30. Después de 4 horas de seguirles el ritmo de caminata, casi corriendo y casi sin descansos nos dicen que se terminó la última de las 4 durísimas subidas y sus 4 no más fáciles bajadas correspondientes. Suspiramos de alegría, pero las 2 horas que siguieron no mejoraron la situación. Caminamos con barro hasta las pantorrillas donde cada paso fue un martirio, poniendo todas las fuerzas en desenterrar cada pie en cada paso, y agarrarse de las plantas no era buena opción por que la mitad estaban llenas de espinas. Ellos deben hacer ese camino cada vez que necesitan ir al pueblo. Sus cuerpos son fuertes y resistentes. Llegamos y nos subimos al bus que nos llevaría después de 4 horas por fin a descansar, con la cara pintada, los pies con ampollas, el corazón inflado y la cabeza revolucionada!

A esperar donde me encuentra la próxima luna llena!

Copiloto inexperto





Paulina soplando por primera vez su velita

La mama de Santiago haciendo mocaguas

Mono con plátanos verdes sancochados
Tomando chicha




1 comentario:

  1. hermosoooo !!!!! nosotros con el corazon inflado de alegria y orgullo!!!!! te amamos ...

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